Los signos de estrés laboral incluyen agotamiento emocional, falta de motivación, ansiedad, insomnio, dolores físicos recurrentes y dificultad para concentrarse. Es importante estar atento a estos síntomas y tomar medidas preventivas antes de que se conviertan en problemas graves.
¿Debe adaptarse la formación en prevención a la evolución de los riesgos?
Sí, la formación debe adaptarse a la evolución y aparición de nuevos riesgos, y repetirse periódicamente si es necesario, sin que su coste recaiga...