Porque pueden acumular calor innecesario, humedad o suciedad del entorno, convirtiéndose en una fuente de proliferación bacteriana. Lo ideal es secarlos al aire en un lugar limpio y ventilado, sin contacto con superficies contaminadas.
¿Qué riesgos legales existen si no se cumple adecuadamente con la normativa de legionela?
El incumplimiento puede dar lugar a multas, recargos de prestaciones, inhabilitación profesional, responsabilidad civil por daños e incluso procesos...