Los probióticos en alimentos fermentados ayudan a inhibir el crecimiento de bacterias patógenas como Salmonella o E. coli, gracias a la producción de ácido láctico y la reducción del pH. Esto mejora la conservación y seguridad del producto, reduciendo la necesidad de conservantes químicos y favoreciendo un entorno más estable microbiológicamente.
¿Qué normativa europea regula el desplazamiento temporal de trabajadores dentro de la UE?
La Directiva 96/71/CE del Parlamento Europeo regula el desplazamiento de trabajadores en el marco de una prestación de servicios y ha sido...