Según el RD 1215/1997, los equipos de trabajo, incluidos los de soldadura, deben ser seguros, adecuados al riesgo y mantenerse en condiciones óptimas. El empresario también debe garantizar que su uso no genere riesgos añadidos.
¿Qué es un riesgo eléctrico?
Es el peligro de sufrir lesiones o daños debido a la electricidad, ya sea por contacto directo, arcos eléctricos o fallos de aislamiento.