Carnes frescas, pescados, embutidos sin curar, lácteos no pasteurizados y platos refrigerados. Estos alimentos son altamente perecederos y pueden desarrollar bacterias como Listeria o Salmonella después de su fecha de caducidad, incluso si tienen buen aspecto.
¿Qué ventajas profesionales aporta tener el certificado de manipulador en este tipo de servicios?
Refuerza tu profesionalismo, transmite confianza al cliente y te protege legalmente en caso de reclamaciones. Además, es un requisito habitual si...