Permite conservar aromas, propiedades nutricionales y sabor sin añadir conservantes. Reduce el volumen, facilita el almacenaje, evita el desperdicio de excedentes estacionales y permite preparar caldos, mezclas o infusiones más duraderas. Es una técnica sostenible y económica que se adapta bien a menús saludables y funcionales.
¿Qué es un riesgo eléctrico?
Es el peligro de sufrir lesiones o daños debido a la electricidad, ya sea por contacto directo, arcos eléctricos o fallos de aislamiento.