Un Servicio de Prevención Ajeno para pymes puede ser la clave para crecer y mejorar las condiciones de tus trabajadores.
Dentro del tejido empresarial español, las pymes constituyen el porcentaje más alto. Por lo tanto, estamos hablando de una de las partes más importantes en materia económica y laboral del país.
La pequeña empresa es clave en la economía española y debe trabajar y mejorar sus condiciones en medio de un entorno competitivo y complejo.
Las pymes destacan por volcar todos sus esfuerzos en mantener la mayor productividad posible, realizando gestiones para aquellas tareas que suelen denominar como primordiales. Es en este punto donde muchas pymes, por diversas razones, dejan de lado o realizan una deficiente gestión de la Prevención de Riesgos Laborales, cometiendo un error que puede desencadenar graves consecuencias. Esta visión limitada de la PRL no solo pone en riesgo la salud de los trabajadores, sino que puede derivar en sanciones, aumento del absentismo o pérdida de productividad.
La Prevención de Riesgos Laborales es una cuestión básica tanto a nivel laboral como en el ámbito del cumplimiento normativo. Por ello, un Servicio de Prevención Ajeno para pymes puede ser un factor clave para optimizar el rendimiento y la seguridad del trabajador.
¿Qué es un Servicio de Prevención Ajeno?
Antes de explicar qué es un Servicio de Prevención Ajeno (SPA), debemos recalcar dos cuestiones muy importantes:
- La Ley 31/1995 de Prevención de Riesgos Laborales señala el deber de la empresa de cuidar, proteger y formar en materia de PRL a sus trabajadores.
- El Real Decreto 39/1997, de 31 de enero, recoge varias modalidades de gestión de la prevención, en base a factores como el tamaño de la empresa y el número de trabajadores. Una de estas modalidades es el Servicio de Prevención Ajeno (SPA), el cual vamos a definir a continuación.
Un Servicio de Prevención Ajeno es una compañía especializada en Prevención de Riesgos Laborales, acreditada por el Ministerio de Empleo y Seguridad Social, capaz de asesorar, gestionar e implementar una óptima estrategia de PRL en la empresa, cumpliendo con la normativa vigente.
La falta de recursos y las limitaciones propias de las pymes hacen que la contratación de un Servicio Ajeno de Prevención sea la mejor solución para garantizar el cumplimiento de todas las medidas y obligaciones en materia de formación PRL.
Funciones principales de un SPA
Los Servicios de Prevención Ajenos, dependiendo del tipo de contratación, pueden desarrollar una gran variedad de funciones. Entre otras, podemos destacar las siguientes:
- Diseño e implantación de un plan de prevención de riesgos laborales.
- Actualización del Plan de Riesgos Laborales.
- Evaluación y análisis de los factores de riesgo en la empresa.
- Determinación de las medidas preventivas.
- Supervisión de la salud de los trabajadores.
- Elaboración de planes de emergencia.
- Investigación de accidentes.
Un SPA engloba y tiene incidencia en todas aquellas tareas necesarias para cumplir con la Ley en materia de Prevención y garantizar el cuidado y la seguridad del trabajador. Se adapta a cualquier tipo de empresa y actividad, siendo mucho más resolutivo en las soluciones finales empleadas, especialmente cuando se integra como parte activa del sistema de gestión preventiva de la empresa y no como un recurso externo desconectado del día a día.
Ventajas de contratar un SPA en tu empresa
Las propias condiciones de una pyme pueden convertirse en una verdadera ventaja competitiva a la hora de desarrollar una estrategia de Prevención de Riesgos Laborales profesional y adaptada.
Una de las principales ventajas de estos entornos con menor número de trabajadores es que resulta más fácil fomentar la implicación, el seguimiento y la formación en PRL. Este contacto más directo con el equipo facilita la implantación de una cultura preventiva real, que vaya más allá del cumplimiento formal.
La contratación de una empresa SPA multiplica la eficacia en el desarrollo de las actividades de PRL, al ajustarlas a las particularidades y necesidades específicas de la pyme. Además, permite acceder a conocimientos técnicos especializados y aplicarlos de forma adaptada a su realidad. Esta colaboración estrecha facilita soluciones más personalizadas, eficaces y realistas, que pueden integrarse con agilidad en la operativa diaria.
Una prevención bien gestionada no solo protege, también mejora procesos, fortalece el compromiso del equipo y construye empresas más responsables y competitivas. Por eso, es fundamental seleccionar un SPA que no solo cumpla con los requisitos legales, sino que ofrezca formación de calidad, se adapte a las necesidades reales de tus empleados y trabaje contigo como un verdadero socio preventivo. Solo así aportará un valor real y sostenible a tu empresa.